Estreno de "El Dominó Azul"

El Dominó Azul

Zarzuela en tres actos y en verso. Música de Emilio Arrieta Texto de Francisco Camprodón. Estrenada el 19 de Febrero de 1853 en el Teatro del Circo de Madrid

Introducción y Coro

Canta: Coro

CABALLEROS - Como prenda de esta llama, os suplico, bella dama, me digáis de vuestro traje las señales y el color. DAMAS - No señor. CABALLEROS - Por favor. DAMAS - No señor. Si en sarao amor os guía a correr en busca mía, adivino sabrá haceros el instinto del amor. CABALLEROS - Es rigor. DAMAS - Es error. CABALLEROS - Es rigor. TODOS - Quizás mañana, más convencida de la honda herida queráis decirme / pueda deciros como yo espero, el / mi verdadero traje y color.

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Jesús Romo

Este compositor nació en Haro (La Rioja), el 10 de octubre de 1896. Inició los estudios musicales en su ciudad natal. Dadas sus cualidades se trasladó a Madrid, donde ingresó en el Conservatorio. Finalizados los estudios se dedicó a la música cinematográfica y al teatro lírico. Finalizada la Guerra Civil presentó en Madrid, en 1945, su primera zarzuela importante: LOS CACHORROS. El éxito obtenido le permitió dedicarse a sus próximas obras sin ninguna traba ni censura.
En 1947 estrenó UN DÍA DE PRIMAVERA, que obtuvo una mediocre acogida. En 1953 estrenó en Barcelona EN EL BALCÓN DE PALACIO, y en Oviedo EL GAITERO DE GIJÓN, considerada una de sus obras más logradas.
Después de este último éxito su estrella empezó a palidecer. Sus obras pasaron a engrosar la lista de las que sólo quedan en el recuerdo.

(Datos de "Amantes de la zarzuela")

estreno de "Sueño de gloria"

Sueño de gloria

Zarzuela en un acto y dos cuadros. Música: José María Damunt. Libreto: Ricardo Moscatelli. Estrenada en el Teatro Echegaray de Onteniente (Valencia), el día 6 de Diciembre de 1975.

Romanza de Carmen

Canta: Raquel Pierotti

CARMEN - ¡La rosa! La rosa de los vientos ha puesto de nuevo en mi camino recuerdos dormidos por el tiempo que mi alma guardaba en un rincón. La rosa, la rosa de los vientos ha puesto su Norte en mi destino; mi sangre, caudal de sentimientos, vuelve de nuevo, vuelve al corazón. Viento que a ti te llevó, luna que te hizo marchar; hoy me devuelven los dos lo que me hiciera llorar. Puede ser que allí, donde reina Dios, viva nuestro amor sin que tenga fin. No quiero pensar... no quiero otra vez soñar. Cuando yo sola caminaba eras tú, sombra nada más. Cuando yo sólo deseaba nunca más volverte a encontrar... ¡cruzas, pasas vacilante mi camino sin luz! Y te paras un instante en mi puerta, caminante. Sigue, sigue sin mirarme, que en mi desierto tú ya estás muerto para mi cruz... ¡Ah!  Datos extraidos de A toda zarzuela)

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